Los hoteles cuatro y cinco estrellas representan sólo un18% del total del inventario

En la Argentina y Latinoamérica, la oferta de cuatro y cinco estrellas representa tan sólo un 18% del total del inventario. Lo cual, en el país se traduce en unos 412 inmuebles, de los cuales 181 pertenecen a cadenas hoteleras nacionales e internacionales.
Los hoteles cuatro y cinco estrellas representan sólo un18% del total del inventario

Según la última encuesta de ocupación hotelera, realizada por el Indec, al cierre del tercer trimestre de 2022 en la Argentina existen un total de 2285 hoteles activos.

Si se analiza por destinos, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires es la localización que presenta una mayor cantidad de propuestas de cuatro y cinco estrellas. Aquí conviven unos 99 hoteles de este tipo. La contracara de esta realidad es la ciudad de Córdoba, allí tan sólo existen unos 18 complejos de este tipo. Por su parte, las cadenas son poseedoras del 30,4% del inventario porteño de los hoteles de las dos categorías más altas. En la provincia de Buenos Aires este número baja a casi la mitad (es decir, un 18,2%), así lo indica el Reporte de Mercado hotelero elaborado por Newmark Argentina e Innova Group

Los hoteles cuatro y cinco estrellas representan sólo un18% del total del inventario

A la hora de hablar de regiones, la Patagonia figura primera en el rankig con 447 hoteles. De ellos, 86 son los que pertenecen al standard superior. La región del norte del país reúne a unos 315 establecimientos, de los cuales 47 son cuatro y cinco estrellas.

La firma Wyndham -que incluye a la firma Howard Johnson-, es la marca que da cuenta de mayor presencia en el país (en términos de cantidad de establecimientos), con 53 hoteles de categoría superiores (cuatro y cinco estrellas). El segundo lugar de este ranking es ocupado por DOT Hoteles, una bandera que tiene una marcada presencia en la región patagónica.

Los hoteles cuatro y cinco estrellas representan sólo un18% del total del inventario

Un hotel impacta de manera positiva en la calidad del espacio urbano y arquitectónico, en el desarrollo económico, en la generación de empleo de calidad directo e indirecto, en la seguridad y calidad del espacio público, en la rentabilidad y valor del real estate. “Resulta indistinto si un hotel llega a un destino consolidado para ofrecer espacios de alojamiento y bienestar, o si ese destino nace a partir de la llegada de un hotel. En ambos casos, su entorno se verá beneficiado por su presencia y el hotel se convertirá en el vecino “favorito”. A menudo, podemos identificar al hotel como el mejor edificio de la cuadra, del barrio, y en ocasiones, del destino. Los hoteles se conciben, proyectan y construyen como puntos de atracción, como lugares a los cuales las personas quieran ir, quieran permanecer y, sobre todo, regresar”, explica Domingo Speranza, presidente de Newmark Argentina.

Además, Francisco Gutiérrez de Arrechea, Co Founder & Partner de Innova agrega que en un mundo en el cual la tecnología permite la independencia entre el lugar de residencia y el lugar en el cual se desarrolla la actividad económica, una enorme comunidad de nómades digitales demanda hoy y demandarán más a futuro, lugares donde dormir cuando se encuentren “cada vez más a menudo y por más tiempo”, fuera de casa.

Los hoteles cuatro y cinco estrellas representan sólo un18% del total del inventario