La construcción en seco se impone en la agenda verde

En clave medioambiental, la técnica se caracteriza por su velocidad en los tiempos de ejecución y, como su nombre lo indica, porque los materiales utilizados no necesitan conglomerantes húmedos para el armado de estructuras. Más información en boca de los especialistas en Steel framing, su variante más conocida.
La construcción en seco se impone en la agenda verde

Con prisa y sin pausa, millennials y centennials imponen la agenda verde y el sector no es ajeno a la tendencia. Tanto la reducción de residuos sólidos y de empleo de recursos energéticos como el ciclo de vida de los materiales utilizados y el cuidado de la huella total de carbono se presentan como prioridades, en línea con las exigencias de las nuevas generaciones. Y también del planeta.

Las enumeradas son, todas ellas, las características de la construcción en seco, por lo que no sorprende que las ideas de sustentabilidad y sostenibilidad aparezcan en las reflexiones de las empresas que utilizan este modelo de construcción abierto, que permite ejecutar cualquier obra con elementos prefabricados. Pero, como se leerá, sus ventajas no son sólo medioambientales.

Un primer dato preciso: el steel framing es su sistema más conocido. “Permite ejecutar cualquier tipo de obra con elementos prefabricados, sin el uso de mezclas húmedas, que se fijan a las fundaciones con anclajes mecánicos o químicos”, determina Alejo García Guevara, director de SteelPlex Buenos Aires, explicando que la empresa utiliza estructuras panelizadas, a partir de láminas de acero galvanizado, que es la materia prima del sistema de construcción en seco.

Luego, indica que se utilizan placas de yeso y otros elementos aislantes y rigidizadores. “Es un sistema que tiene, en definitiva, una total provisión de insumos que se hacen en el país”, destaca García Guevara, agregando un plus en clave productiva.

En detalle, la sustentabilidad del steel frame pasa porque el acero es 100% reciclable y permite una gran reducción de consumo de agua y desperdicio de materiales durante el proceso de obra, que es 40% más rápido que en el sistema húmedo (mampostería), generando, además, 0% de humedad posterior en la vivienda, gracias a los elementos técnicos que lo componen.

“Una casa de steel frame consume un 50% menos de electricidad y gas anuales para su climatización”, retoman en la empresa. “Tiene mejor aislación acústica; una vida útil superior a 300 años y su diseño estructural garantiza una resistencia superior frente a sismos, vientos e incendios”, enuncian, antes de destacar un detalle no menor: tiene costo cierto ya que se conocen desde el inicio el 100% de los ítems y cantidades a utilizar, sin adicionales.

La construcción en seco se impone en la agenda verde

CUESTIÓN DE NÚMEROS

Lucas Salvatore, director de Idero, sostiene que el sello de la compañía está en el principal material que utilizan para la construcción: el acero. En este sentido, informa, todos sus proyectos y obras poseen “Alma de Acero”, compuesta por estructura principal de columnas y vigas de perfiles de este material de alta resistencia. De este modo, enfatiza, la construcción es más ecológica, moderna y perdurable.

“El acero genera un menor impacto ambiental, logrando un menor peso de estructura, reducción de fundaciones y de movimiento de suelos. Además, es 100% reciclable y genera una menor huella de carbono que el hormigón en su producción”, continúa el directivo de la empresa que, en sus propias palabras, integra industria y arquitectura.

Asimismo, en la firma destacan que la construcción liviana –“en especial la que es en seco”- disminuye el impacto en el territorio, al tiempo que es altamente eficiente por su diseño de la envolvente. “Todo ahorro en materiales y energía terminan generando una importante reducción en el impacto ambiental”, realzan.

También resaltan otras variables estrictamente relacionadas con lo económico. “Las antiguas construcciones pesadas y poco eficientes siguen siendo una alternativa del mercado, muchas sostenidas por el bajo nivel salarial y con mínima participación de las contribuciones patronales”, analiza Ariel Sueiro, gerente de Relaciones Comerciales e Institucionales de la compañía.

En tren de comparaciones, Sueiro apunta que estirar los tiempos de obra utilizando las viejas alternativas permite ir adecuando el flujo de fondos ante la falta de créditos hipotecarios. “Si retornasen, modificaría fuertemente el cash flow de las inversiones, por lo que el tiempo de entrega volvería a ser una variable importantísima de la inversión”.

La construcción en seco se impone en la agenda verde

¿ACERO FLEXIBLE?

No, no hay oxímoron en el subtítulo. En Barbieri, Silvano Canton, gerente Regional de Marketing, suma ventajas. Según comenta, la construcción en seco posee una flexibilidad arquitectónica que permite su adaptación a cualquier clase de proyecto, desde una vivienda unifamiliar hasta proyectos de gran escala o una ampliación; todo, en menor tiempo.

“Sucede que, en comparación con el modelo húmedo, la utilización de perfiles de acero galvanizado presenta grandes facilidades para refacciones y reformas posteriores de la obra”, profundiza el ejecutivo de la firma que posee toda una línea de construcción en seco.

“Promovemos el steel Frame como una alternativa viable para responder al déficit habitacional ya que, desde el punto de vista técnico, permite una progresividad constructiva y modular que acompaña la forma de construcción en los barrios y la industrialización de la vivienda, lo que facilita el montaje, reduciendo los costos finales”, continúa Canton.

Por lo pronto, tanto desde Barbieri como desde Consul Steel –consultora que engloba a varias firmas del sector-, señalan que buscan facilitar el acceso a la vivienda a personas de comunidades en situación de vulnerabilidad, a través de cuatro ejes clave: la articulación con ONGs y el sector público, la industrialización de la construcción, la progresividad constructiva en materiales y en tamaño para hacerlo más accesible, y la integración a la comunidad.

DUDAS Y CERTEZAS

Así y todo, aunque en menor medida que antaño, continúan las dudas acerca de las posibilidades y potencialidades de la construcción en seco en general y del Steel framing, en particular. En este sentido, desde el sector informan que en el pasado quizá era visto como un sistema “prefabricado” y asociado a calidad limitada. Hoy en día, sus altas prestaciones están mucho más difundidas.

“En general, las preguntas de los clientes tienen que ver con los tiempos de duración de la obra y la calidad de la ejecución; es decir, cómo conseguir constructores calificados para su casa. Ya no se escuchan dudas respecto de la calidad del sistema porque evidentemente se han difundido sus alcances respecto de su gran performance”, coinciden los voceros.

Más allá de las definiciones, lo cierto es que esta alternativa viene creciendo en toda la región. Este dato se ve avalado por el registro de consumo de placas de yeso por habitante y por año. En la Argentina este indicador se encuentra en aumento, con 0,9 m2 por habitante y año; mientras que en Chile alcanza 2,6 y en Uruguay 1,1, lo que indica el potencial de desarrollo de la construcción en seco, de la cual el steel framing es su variante estructural.

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VALORES

SteelPlex: el costo de m2 US$ 100. Incluye: estructura panelizada, ingeniería y cálculo estructural con memoria, planos de montaje, garantía, entrega en obra sin costo en CABA y Gran Buenos Aires y supervisión en obra.

Idero: en su línea de casas llave en mano, el m2 oscila entre US$ 900 y 1200, y entre 700 y u$s950, más IVA, según el modelo de casa y la línea elegidas. Asimismo, al ser una casa llave en mano los valores varían, según las terminaciones y otros detalles elegidos.

# Por Victoria Aranda