El diseño estuvo a cargo de la empresa Kraftwelt para un comitente privado, y se implanta sobre un terreno próximo a una esquina de muy poca profundidad (8.66 m de frente x 14m de fondo), en el Barrio de Nuñez. El tipo de lote no es muy común dentro de la Ciudad de Buenos Aires, dado que el ordenamiento de las manzanas (100m. x100m.) los organiza de más profundos a mitad de cuadra y menos profundos a medida que se acerca a las esquinas.
La premisa de este proyecto, fue lograr una casa cerrada hacia el exterior, que se perciba como sumamente segura.
LA PROPUESTA
Con las condicionantes de dimensión mencionadas, se desarrolló una vivienda que ocupó todo el terreno, liberando y respetando el retiro obligatorio del frente. Según se explicó desde el Estudio, se perforó el volumen resultante -prácticamente cúbico (8.66m x 11m x 9 de altura)- con dos patios laterales que permitieron proporcionar aire y luz a los espacios interiores.
Como espacio de expansión se utilizó la terraza, de muy buenas proporciones, visuales abiertas y con excelente orientación. La misma se articuló con los patios, otorgándole al planteo luz, verde y buena ventilación.
La planta baja contó con cochera para dos autos y un estudio; en el primer piso se articularon diferentes funciones dentro de un gran espacio: living-comedor-cocina. Para el segundo piso se proyectaron tres dormitorios, uno de ellos en suite. Y el tercer piso, se destinó a una terraza de expansión, con parrilla y pileta.
Todo el planteo se materializó con una estructura de hormigón armado, utilizado como lenguaje expresivo, privilegiando la austeridad en el uso de materiales y revestimientos.
“Es importante destacar que un partido de vivienda en esquina o próxima a la misma, obliga -dadas las proporciones de los lotes- a proyectar planteos en vertical, logrando los espacios de expansión a medida que se suceden los diferentes piso” concluyeron desde Kraftwelt.