Los períodos de elevada incertidumbre afectan las decisiones de las empresas y las familias, especialmente cuando involucran una porción significativa de su patrimonio y se refieren a bienes de mediano y largo plazo. Aun en este contexto, Oceana Puerto Madero ya vendió más del 70% de las unidades que se comercializan desde los 5.500 US$/m2.
Este proyecto de baja densidad está compuesto por dos torres de ocho pisos vinculadas por una gran plaza central de 7.200 m2. En total incluye 192 unidades de 1, 2, 3 y 4 dormitorios que cuentan con superficies entre 82 m2 y 650 m2, extensos balcones y vistas abiertas a la plaza central y al dique. En los últimos pisos se ubican los penthouses, con terraza propia y piscina privadas, y en el nivel 0 el complejo cuenta con diez locales comerciales, cinco en cada edificio.
Los espacios comunes están intervenidos con obras artísticas especialmente concebidas por ocho artistas latinoamericanos. Las piezas tienen en cuenta el mobiliario, la orientación y las características estilísticas de los edificios que componen el complejo, y que en conjunto constituyen un acervo único, pensado exclusivamente para este espacio residencial. Las obras reflejan la singularidad arquitectónica del proyecto y el entorno paisajístico de Puerto Madero: el río, el paseo costero y la reserva ecológica.
¿Quiénes compran este tipo de proyectos?
Al ser consultado, Diego Schwengber, director comercial de Consultatio, comentó: “Nuestro público incluye tanto inversores como usuarios finales. Las unidades más chicas son las elegidas por parejas jóvenes y matrimonios con hijos grandes que dejan sus casas para mudarse a un complejo con todas las comodidades y cerca de todo, pero con menos m2. También hay inversores del interior y exterior que quieren tener un segundo hogar en Buenos Aires, o tienen hijos estudiando en la ciudad y lo eligen como lugar para quedarse cuando los visitan. Otro público inversor son las empresas que compran unidades para sus altos directivos expatriados; o multinacionales como alternativa a sus negocios principales”.
¿Qué características son las que atraen a este público?
“La integración de arquitectura, arte y paisajismo es uno de los principales atributos de Oceana, ya que propone un estilo de vida diferente que busca redescubrir los espacios a través de nuevas formas de vinculación con sus entornos. En ese sentido, el programa de arte y el entorno natural constituyen los mayores diferenciales del proyecto. El predio cuenta con un amplio parque que conecta los dos edificios. El verde y el agua conforman un diseño paisajístico único, con árboles, plantas y flores cuidadosamente seleccionadas para abrir nuevas perspectivas de interacción visual entre los espacios interiores y exteriores”, explicó Schwengber.
Cada edificio cuenta en el último piso con un área de recreación, parrillas cubiertas y una piscina exterior; y en el subsuelo que comunica todo el complejo se encuentra otra pileta climatizada, un gimnasio con máquinas de última generación, sauna, spa, SUM, espacio de coworking y un simulador de golf.