El sur de la ciudad y su potencial de crecimiento
En una ciudad acostumbrada a que los desarrollos inmobiliarios de alta gama se concentren en Palermo, Belgrano o Núñez, Moca 2 acaba de redefinir el mapa. El nuevo edificio de G&D Developers, ya finalizado y en plena etapa de entrega de unidades, ha tenido tal nivel de éxito y demanda que la desarrolladora ya proyecta Moca 3.
Lejos de los corredores tradicionales del real estate, el edificio se erige en la esquina de Finochietto y Hornos, a metros de Plaza Constitución y con acceso directo a las autopistas 25 de Mayo y Arturo Frondizi. Una ubicación que históricamente fue leída como periférica pero que hoy, gracias a una transformación urbana sostenida, empieza a consolidar un nuevo polo residencial y cultural en el sur porteño.
El arquitecto Daniel Mintzer, socio de la desarrolladora G&D Developers explica que “Moca 2 instala un nuevo paradigma demostrando que el sur de la ciudad, al igual que otras zonas no tradicionales y aun relegadas, puede ser competitivo, deseable y rentable. No hace falta una geografía “top” para justificar calidad, y cuando el producto es sólido, el mercado responde donde nadie lo espera”.
El edificio está en el corazón de Barracas, situado en Finochietto 990, cercano a parques, plazas, universidades, locales gastronómicos, culturales y hospitales. Gana en conectividad y accesibilidad con los principales transportes públicos de pasajeros por la cercanía a Plaza Constitución.
El proyecto no replica, sino que profundiza el impacto transformador que se inició con el primer Moca y lo replantea en un sólido edificio de 273 unidades entre monoambientes, 2, 3 y 4 ambientes, distribuidas en 17 pisos residenciales, uno de oficinas en el primero y las cocheras en el subsuelo.
Entre los amenities que siguen estándares de edificios de alto valor se destacan un SUM, el gimnasio, pileta climatizada, solarium, parrillas, bicicletero y seguridad 24h. Además, se destacan las carpinterías de doble vidrio hermético (DVH), cerraduras electrónicas con detección dactilar y conectividad Wi-Fi, anafes y hornos eléctricos de marcas reconocidas, así como mesadas de cuarzo en los baños y pisos vinílicos de alta calidad. Todo esto, en un contexto donde tradicionalmente se asumía que el público premium no cruzaba al sur. MOCA 2 demostró exactamente lo contrario: la demanda respondió incluso antes de finalizar la obra.
HERENCIA FABRIL
Mientras gran parte del real estate porteño continúa peleando contra la sobreoferta en zonas más tradicionales de la ciudad, con este emprendimiento se hizo lo que pocos se animan: apostó a una zona subvalorada, construyó producto de primer nivel y el mercado lo validó sin dudar. Concebido sobre los antiguos terrenos de la fábrica Bagley, el mismo terreno industrial donde nació el primer Moca, el proyecto volvió a convertir herencia fabril en diseño contemporáneo, logrando posicionar a la zona sur como una alternativa real para vivienda y para inversión. El valor de las unidades arranca en US$ 66.000 para unidades de monoambientes y llega a US$ 220.500 para las de cuatro.
Finalmente, Mintzer concluye al definir a Moca 2 como “una señal clara, contundente y verificable de que Buenos Aires tiene mucho más para crecer cuando se desafían los límites tradicionales del desarrollo urbano”.
