Cómo afecta la subida del blue al mercado inmobiliario

Cintia Azpiazu, manager de Gustavo De Simone Soluciones Inmobiliarias, indica que la subida del dólar desestabiliza el accionar de los clientes, lo que no implica que afecte el mercado. “Aquel cliente que cuenta con dólares en mano suele accionar aprovechando dicha suba, especulando con que los vendedores puedan tener necesidad de venta y realizando ofertas más “agresivas”. Consideran que al subir la moneda el valor de las propiedades debería bajar a lo que está publicado o negociado en una operación. Por parte de los propietarios, genera la misma incertidumbre que al comprador, pero afectando la decisión en cuanto a si es momento o no para bajar su propiedad, o para poner a la venta”, puntualiza.

¿UN MERCADO PARALIZADO?

Azpiazu, considera que las operaciones no se frenan, pero hay casos excepcionales en que los compradores tras una oferta ya conformada intentan reacomodar dicho monto. Lo que no suele ocurrir porque el 99% de las personas, al no haber créditos cuentan con el dinero en mano. Lo que no debería afectarles el movimiento cambiario. “Es fundamental que los interesados sepan distinguir la situación actual y diferenciar que sus decisiones o acciones no dependen de una inestabilidad cambiaria, sino que prioricen sus necesidades”, opina

Por su parte, Verónica Pagola, CEO de Century 21 Argentina, precisa: “El dólar como es un activo financiero es un anticipador de decisiones sobre otros activos menos líquidos, y eso ha influido en el historial de las decisiones inmobiliarias. En términos macro, no es novedad que cuando el mercado financiero está estable, las operaciones aumentan y cuando esta volátil se ralentiza.

“Cuando el dólar está sobre valuado por lo general los agentes económicos lo capitalizan contra otros activos que vienen retrasados (por ejemplo salarios y materiales de construcción). Dicho de otra forma, cuando el dólar sube se construye más porque el costo queda atrasado. Por lo tanto, se venden lotes de terreno donde construir o desarrollar. Por lo que se generaría una preferencia por construir o comprar nuevo por sobre lo usado, lo que termina repercutiendo en una nueva baja de precios de estos últimos”.

En suma, ante el interrogante de si se paralizan las operaciones, “podríamos decir que inicialmente sí, porque la volatilidad es la que genera la incertidumbre acerca de los escenarios, pero una vez que se estabiliza en el nuevo valor, ahí los consumidores e inversores se deciden en torno a la inversión a realizar- explica- pero nuestra historia en el mercado argentino, como mercado fluctuante, ya hemos experimentado estas subas y bajas con demasiada frecuencia, y cada vez notamos que esta reacción natural de freno, se va neutralizando. Por lo que el consejo sería no desesperarse y analizar esa motivación a la hora de materializar la decisión”.

Francisco Altgelt, presidente de Altgelt Negocios Inmobiliarios, resalta: “La realidad es que sí, en otro momento y en otro mercado esto hubiera generado una parálisis absoluta. El tema es que ya venimos con un mercado bastante parado, en recuperación en los últimos meses, y no pareciera que esté shock fuera a generar una parálisis. Los números están reflejando que el mercado está activo”. Un ejemplo, la cantidad de escrituras en la ciudad de Buenos Aires refleja que hay operaciones.

Además, agrega que el mercado ha sincerado los precios y el comprador está viendo que ya han llegado a un piso. Por lo tanto, toma decisiones de compra y, quizás, el año electoral y el posible cambio de gobierno le genere una expectativa de posible alza en los valores. Por eso, la gente está tomando esas decisiones. No parece que quieran refugiarse en el dólar, sino en propiedades.

“Pero es cierto que el movimiento fuerte del dólar que lo llevó casi a $500, una suba de $100 en una semana, fue tremendo. Sin embargo, en principio, no parece que vaya a haber una parálisis como tal vez la hubiera habido en otro momento, pero hay que estar atentos; hay que estar atentos porque fue una sacudida bastante importante”, recalca.

¿AFECTA ESTA ESCALADA DEL DÓLAR EL VALOR DE LA PROPIEDAD?

“Generalmente cuando sube el dólar los clientes suelen realizar un pequeño ajuste en sus propiedades, pero dicho ajuste sería un argumento más tras rever otros factores como la cantidad de visitas que tiene la propiedad, consultas registradas u ofertas formales recibidas. El mercado inmobiliario no necesita un tipo de cambio bajo para mantener valores de sus propiedades, sino que depende de tener un dólar estable”, evalúa Azpiazu.

Diego Migliorisi, socio gerente de Migliorisi Propiedades, considera que la suba del dólar genera incertidumbre pero no afecta de fondo. Quien no podía comprar antes de la suba, tampoco lo podrá hacer ahora (falta de crédito y capacidad de ahorro). Por otro lado, al no haber propietarios endeudados, tampoco afecta en los precios.

“No se han paralizado operaciones. El comprador activo continúa con su objetivo de comprar porque sabe que en un tiempo no va tener las mismas oportunidades. No hay lugar para especulaciones. Los propietarios que ya adecuaron sus precios no van a bajar más por la suba del dólar. El ahorro en m2 es hoy una oportunidad”, destaca

A su vez, Hernán Pisarenko, socio de Bridge Argentina, remarca: “En los últimos años venimos sufriendo situaciones como la de estos días, y ya vimos que, por más turbulencia que haya, el mercado ajusta en cantidad de operaciones y le cuesta mucho ajustar en precio”. Pero reconoce que si se profundiza la crisis, el golpe es mayor sobre inmuebles destinados a clase media / trabajadora que aquellos destinados a un público más acomodado / clase alta, que en los últimos años es la más activa. “Está visto que los precios vienen sufriendo bajas en los últimos tiempos, bajas que se terminan de validar si el vendedor necesita realmente vender”, subraya. Y señala que el mercado Premium es el que menos sufre estos vaivenes porque los vendedores no están predispuestos a tomar bajas en los precios.