Desde 1996 declarado Patrimonio Histórico, Artístico y Cultural de la provincia de San Juan (Ley 6747), el Club Sirio Libanés atesora 103 años desde su creación- como Juventud Libanesa- para reunir a los inmigrantes que comenzaron a llegar a fines del siglo XIX a la provincia.
Con una superficie de 5.100 m2. el frente sigue los cánones de la arquitectura árabe clásica, con balcones de estilo morisco y una fachada con un arco, que descansa sobre dos columnas, que constituye su acceso principal. El vestíbulo tiene las paredes laterales recubiertas de mármol travertino proveniente de las canteras de San Juan mientras que una puerta de hierro claveteado da entrada al hall, con piso de mármol rosa. En la planta baja se ubican las dependencias administrativas de la secretaría, gerencia y portería. Al costado izquierdo se encuentra el Salón de las columnas, que evoca el Patio de Los Leones de La Alhambra, y desde allí se ingresa al Salón de damas y al Patio de la fuente, rodeado por una gran columnata. A la derecha de la entrada principal, el salón de actos, tiene capacidad para 350 personas. Balcones con arcadas y columnas moriscas sobre capiteles decorados, dan hacia la calle, donde se despliegan los emblemas nacionales de Siria, Líbano y Argentina.
Una gran torre morisca corona el edificio y el mirador cuenta con grandes faroles de hierro labrado.
El terremoto del 15 de enero de 1944 produjo graves daños en la sede social, y sólo quedó en pie el salón de las columnas. Con estos hechos, finalizó el ciclo de “la libanesa”, sede original, y dio origen al club que cambió su nombre, reformó sus estatutos y abrió sus puertas a todos los sanjuaninos. Actualmente, en Entre Ríos Sur 33 donde se ubica, funcionan un restaurante y un café en la azotea, y la visita es promovida libremente a quienes se acercan a disfrutar del mobiliario y las intalaciones.de un patrimonio arquitectónico que vale la pena conocer.