Piedras volcánicas para revestir piscinas

La nueva tendencia en decoración de exteriores tiene en las piedras naturales, un nuevo producto de calidad, ya que pueden ser utilizadas para revestir tanto piscinas como fachadas.
Piedras volcánicas para revestir piscinas

Particularmente en las piscinas tienen mayor uso debido a que la piedra tiene la capacidad de liberar minerales, promoviendo un ambiente de natación más saludable, ya que conntribuyen a la purificación del agua.

Las piedras de origen volcánico contienen en su estructura un mineral llamado zeolita, que es efectivo para reducir los niveles de amonio y absorber metales pesados que pueden acumularse en las piscinas. Además son un agente purificador de agua, lo cual se traduce en una reducción de uso de cloro y químicos. Por otro lado, se las considera energéticas y al contacto con la piel confieren sensación de bienestar, por ser un desintoxicante natural que promueve la vitalidad. Gracias a su textura superficial también presentan una alta resistencia al deslizamiento.

La piedra más destacada y conocida en el mercado argentino es la piedra Green Stone o Sukabumi Stone, una variante exótica originaria de Indonesia que fue importada por primera vez por Holstein en el año 2018 y es única en mercado nacional, ya que proviene de una cantera de alta calidad y se encuentra pulida en una sola cara. Su color, de un tono verdoso que se torna esmeralda bajo el agua, crea espacios de belleza.

Piedras volcánicas para revestir piscinas

COLOCACIÓN

Las piedras naturales pueden colocarse en piscinas en proceso de construcción o en remodelaciones de piscinas ya construidas. Previo a la colocación, se debe preparar la superficie para lograr una óptima adherencia. En cuanto a las remodelaciones, se debe realizar una verificación de la superficie en función al revestimiento que tenía colocado anteriormente, ya sea pintura, venecitas o hidrocoat por ejemplo.

Con respecto a los costos, el metro cuadrado de este tipo de piedra natural ronda alrededor de los US$120, y el mantenimiento de la piscina es igual que con otro revestimiento y depende de la calidad del agua que haya en la zona y el tratamiento diario que se realice. Luego de 5 años desde la colocación, se recomienda realizar un pulido, este proceso es rápido y genera una limpieza superficial de la piedra para retirar las adherencias que se puedan haber generado con el pasar de los años, como el sarro, por ejemplo.