Pisos de gran formato innovan el mercado
En un mundo donde el diseño minimalista marca tendencia y el concepto de “menos es más” guía cada decisión estética, los pisos de gran formato se han consolidado como protagonistas indiscutidos en arquitectura y decoración. Esta corriente visual prioriza los ambientes despejados, armónicos y funcionales, donde los elementos estructurales no compiten con los decorativos, sino que los enmarcan. En este contexto, las superficies continuas sin cortes visuales aportan una sensación de amplitud y sofisticación únicas. Así, los pisos de gran formato responden a las nuevas demandas de hogares y espacios comerciales que buscan belleza, simpleza y funcionalidad en una sola solución.
Lo que diferencia a los pisos de gran formato de los tradicionales va mucho más allá del tamaño. Mientras que un cerámico clásico ronda entre los 30×30 cm y 60×60 cm, los formatos grandes arrancan desde los 60×120 cm y alcanzan incluso los 120×240 cm o más. Esta diferencia en escala transforma completamente la percepción del ambiente, generando un efecto visual de continuidad que reduce la cantidad de juntas a la vista. Esta menor segmentación del espacio no solo mejora la estética, sino que también facilita la limpieza y el mantenimiento diario. Además, su diseño uniforme aporta una sensación de orden y prolijidad que resulta difícil de lograr con piezas pequeñas.
A nivel técnico, estos pisos también presentan beneficios clave: son más resistentes, menos porosos y con mejor desempeño ante el tránsito intenso. Esto los hace ideales tanto para viviendas modernas como para espacios de uso comercial. Su propuesta se apoya en la combinación perfecta entre innovación, durabilidad y estilo.
“La creciente popularidad de los pisos de gran formato se debe, en gran parte, a su capacidad para responder a una demanda estética clara: crear ambientes más fluidos, homogéneos y fáciles de mantener. El diseño contemporáneo prioriza la continuidad visual, la limpieza del entorno y la reducción de elementos que interrumpen la vista, y estos pisos cumplen con todos esos requisitos. Además, su popularidad también se explica por el contexto económico actual que favorece las importaciones desde países como Brasil. Con su mercado interno en crisis, muchas fábricas brasileñas están volcadas a exportar a nuestro país, ofreciendo precios cada vez más bajos y calidades garantizadas. Además, los fletes internacionales están en niveles controlados o en baja, lo cual contribuye aún más a que lleguen productos altamente competitivos. Por último, las fábricas locales también se están sumando a esta tendencia de grandes formatos, estando a la altura de las circunstancias, gracias a las inversiones que realizaron durante los últimos años en maquinarias. Esto ha abierto una nueva puerta a diseños vanguardistas, formatos grandes y opciones accesibles”, señaló Arnaldo Meilinger, Gerente de Compras de Familia Bercomat.
Sin embargo, la instalación de pisos de gran formato no es un proceso sencillo y requiere conocimientos técnicos especializados. Por su tamaño y peso, estas piezas necesitan una superficie perfectamente nivelada, el uso de adhesivos específicos de alta performance y herramientas profesionales para su manipulación y corte. Es fundamental evitar imperfecciones comunes como el “efecto diente”, que se genera cuando una pieza queda más alta que la otra. Para lograr una instalación impecable, se recomienda usar sistemas de nivelación con clips y calzos que aseguren un asentamiento uniforme. Asimismo, la elección de la mano de obra es clave: un instalador experimentado marcará la diferencia entre un resultado visual perfecto y uno con errores costosos.
