Desde Suecia, Canadá, Tailandia, Inglaterra, Francia, China, Finlandia y Estados Unidos hasta en nuestro país, donde hay ejemplos en diversas ciudades de Misiones, una provincia forestal maderera por excelencia, junto a Corrientes y Entre Ríos, en el Delta bonaerense, pasando por Chaco, Córdoba y varios sitios de la Patagonia.
“De hecho, la tendencia a la construcción de casas pequeñas (las famosas Tiny Houses), viviendas modulares y las casas en los árboles son cada vez más utilizadas para emprendimientos de hotelería, turísticos y también para quienes gustan tener una vida más trashumante y pueden llevarse su casa, literalmente, a cualquier parte del mundo”, explica Daniel Vier, presidente de CADAMDA.
El posicionamiento de la madera ha cambiado radicalmente en los últimos años. “Actualmente, el mercado de la construcción con madera en Argentina se encuentra en un proceso de crecimiento sostenido, a pesar de las dificultades que se presentan. Comparado con 10/20 años atrás, se puede observar un cambio significativo en la demanda y en la oferta de construcciones con madera”, explica Vier. “De hecho, hace algunos años, la madera no era considerada un material de construcción relevante en Argentina y se utilizaba principalmente para elementos decorativos o en construcciones rurales. Sin embargo, debido a la necesidad de construir viviendas más eficientes y sostenibles, la madera es hoy cada vez más popular en la construcción y en otros mercados y rubros”.
Por su parte, Daniel Lassalle, gerente de CADAMDA, explica: “La madera es una solución potente para la construcción y la arquitectura que permite satisfacer las necesidades de la bioeconomía. Sin duda, es el momento de avanzar hacia la tendencia internacional de la arquitectura sustentable en sus múltiples sistemas y con materiales con menos huella de carbono, que demandan menores recursos y que finalmente logran una vivienda con menor consumo de energía y más amigable con el medio ambiente”.
Pero no sólo son para fines turísticos, de negocios o de vivienda personal, las casas del árbol también pueden ser un proyecto más cercano a la familia y al disfrute habitual.
“Sin dudas, la construcción de casitas del árbol es un proyecto emocionante que permite a niños y adultos dar rienda suelta a su creatividad mientras disfrutan de la belleza de la naturaleza, especialmente con el hilo conductor de la madera como material principal de construcción. Ya sea como un lugar de juegos, lectura o simplemente para relajarse, una casita del árbol se convierte en un refugio mágico en las alturas”, acota Diego García Pezzano, responsable del Dpto. de Arquitectura de CADAMDA.