El Real Estate bajo la lupa femenina

Mariana Stange, Alejandra Covello, Ana Simeone, Florencia Miconi, Soledad Balayán y Cynthia Edenburg, coordinadas por Mali Vázquez, directora institucional de la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos, dieron su parecer sobre la situación actual y sobre la necesidad de que se tenga en cuenta el importante rol social de la construcción en virtud de los importantes recursos que moviliza en el país.

Florencia Miconi, CEO de la constructora marplatense IMASA, sostuvo que a pesar del contexto macro la construcción sigue en marcha a raíz de los precios competitivos, como un medio de organizar activos, impulsada por privados que apuestan a la oportunidad. “El incremento de precios por el alza en los materiales, como el vidrio y el hierro, crea preocupación”, sostuvo. Sin embargo, el desarrollo de nuevas centralidades en Mar del Plata, como el Distrito de Arte y Diseño, están movilizando inversiones que van a generar un nuevo ciclo en la ciudad.

Desde el punto de vista estadístico, Soledad Balayán, que lleva adelante junto a otras empresas un registro de operaciones inmobiliarias con los precios de cierre, comentó que el usado venía repuntando en los últimos meses, tendencia que se frenó luego de las PASO. Respecto a los valores del primer semestre de 2022 se registró aumento del 3% en términos nominales. Y consideró que sin créditos y con cepo no se puede esperar demasiada expansión de la compraventa, que desde el 2016 experimentó una contracción del 43%.

MERCADO CORPORATIVO E INDUSTRIAL

“El mercado de oficinas se ha recuperado” aseguró Mariana Stange, quien expuso sobre qué interesante fue ver el cambio que se operó en los modos de trabajo, con nuevas exigencias para atraer a los colaboradores. Palermo, Belgrano y Núñez dijo, presentan cero vacancia, de oficinas entre 300 y 500 m2, aptas para empresas tecnológicas y pymes. Consideró que en lo que hace al Microcentro, hay casi un 20% que apuesta a la reconversión, no de modo binario sino con mixtura de usos, aunque con edificios que necesitan ser puestos en valor. El desafío es anticiparse a los que viene, con valores que van entre los US$ 28 y 38 por m2, y una rentabilidad posible en algunas zonas de entre 4 y 4,5 %.

Ana Simeone, fue muy optimista sobre el desarrollo del mercado industrial “que es amplísimo y se extiende por toda la Argentina”. Allí actúan los constructores, el comitente, y el que compra para rentar. “Es el sector que mantuvo más los valores” indicó. Una nave standard, se alquila entre US$ 200/250 por m2. Y hay una buena demanda de galpones para la venta de productos a través del e-comerce, que va ganando importancia en el país, con inversores que intentan posicionarse antes de diciembre a dólar met.

La rentabilidad es variada, pero los Parques Industriales proliferan – ya hay más de 600- y también inversores dispuestos a construir “a medida” con el cliente ya acordado, lo que se transforma en un negocio financiero. Desde el punto de vista monoambiental, también es ganancia, porque los parques son estrictos en este tema, con lo que se abaratan los seguros. Muchas plantas empiezan a prever los vehículos eléctricos y nuevos servicios vinculados.

Alejandra Covello resaltó que toda la obra nueva está dirigida a una demanda insatisfecha, pero bajo el concepto de armar comunidades, por lo cual los grandes polos, que actúan como llamadores, logran records de precios, especialmente cuando por obra de la inflación, el dinero pierde valor, y los inmuebles significan una capitalización en moneda dura. En este sentido, remarcó que hay 2millones de m2 aprobados para construir, y un millón de m2 listos para vender en Montevideo. “Argentina tiene un potencial inédito, pero hacen falta normativas claras para desarrollarla” apuntó. Pese a todo, manifestó su confianza en el país.

El sector de Puerto Madero, que pese a la crisis mantiene sus características de mercado Premium, fue desarrollado por Cynthia Edenburg, de Miranda Bosch, quien comentó que el m2 en la zona roza estimativamente los US$ 5000 por m2. “Sigue siendo un mercado dinámico, que sostiene los precios con una rentabilidad de entre 4 y 5 % anual, y en los cuales los edificios ostentan personalidad propia”.

Finalmente, a modo de resumen, se concluyó que pese al escenario de incertidumbre, el sector tiene que hacer oir su voz con firmeza, ya que el 35% del producto interno lo genera la construcción. Y a tener en cuenta que los buenos productos superan las crisis, pero que es necesario adaptarse a los nuevos contextos y a los trabajos en red.