El Gobierno reglamentó la ley de blanqueo

Mediante el Decreto 556/22 se reglamentó la Ley 27.679 de blanqueo de capitales destinados a la construcción en obras nuevas o con un avance no mayor al 50%. Una medida que era reclamada por el sector y que ha tenido una positiva repercusión.
El Gobierno reglamentó la ley de blanqueo

El impuesto especial que establece la ley deberá determinarse sobre el valor de la tenencia que se declare, expresada en moneda nacional al momento de ingreso a una cuenta especial. De acuerdo con la reglamentación, para los bienes ingresados desde la fecha de entrada en vigencia de la ley y hasta un plazo de 90 días corridos, la alícuota que deberán tributar será del 5%.

A su vez, los bienes ingresados desde el día siguiente de vencido primer plazo y hasta transcurrido otros 90 días, la tasa será del 10%. Mientras que los declarados desde el vencimiento del segundo plazo y hasta transcurrido 180 días corridos, abonarán una alícuota del 20%.

Los fondos que se declaren deberán afectarse, únicamente, al desarrollo o la inversión en proyectos inmobiliarios en el país, como obras privadas nuevas que se inicien a partir de la entrada en vigencia de la ley (construcciones, ampliaciones, instalaciones, entre otras) y que, de acuerdo con los códigos de edificación o disposiciones semejantes, se encuentren sujetos a autorización o aprobación por autoridad competente.

La moneda extranjera blanqueada debe convertirse a pesos al tipo de cambio comprador del Banco de la Nación Argentina del día en que se depositen los fondos en la Cuenta Especial de Depósito y Cancelación para la Construcción Argentina (CECON.Ar).

REPERCUSIONES

La prórroga del blanqueo es una de las medidas que el sector de la construcción, que viene mostrando un repunte desde 2021, reclamaba como una forma de canalizar la inversión en la construcción de viviendas.

Carlos Spina, presidente de la Asociación de Empresarios de la Vivienda, resaltó que se incluyen medidas tales como el diferimiento en el pago de impuesto a las ganancias en el aporte de terrenos, o el beneficio en bienes personales para los compradores. “Además, en este caso, se introdujo lo que llamamos originalmente “exteriorización productiva”, a partir de lo cual sólo pueden blanquear aquellos que decidan invertir en obra nueva; generando un círculo virtuoso a partir de la generación de puestos de trabajo, invertir en bienes registrables y dinamismo económico. A la vez, es una inversión 100% federal puesto que aplica a todas las ciudades del país, incluso con beneficios ascendentes, a medida que los fondos blanqueados se inviertan a mayor distancia de la Ciudad de Buenos Aires”, explicó.

También hay otros motivos que llevan a pensar por qué debería funcionar esta vez. Spina apuntó que el blanqueo de la ley de incentivos anterior convivió con la salida de la pandemia, los bancos atendían a clientes solo con turnos, sumado a la dificultad para obtener la reglamentación en AFIP, CNV, BCRA, Hacienda, lo cual generó una ventana demasiado corta para el primer y más interesante tramo. Todo eso hoy está reglamentado y vigente. El blanqueo, sobre todo en el primer tramo, es muy atractivo, dado que blanqueando dólares la alícuota se paga al oficial, bajando el costo a prácticamente el 50%, es decir con 2,5% los primeros 90 días se puede acceder al blanqueo para comprar inmuebles que cuenten con el Código de Proyectos Inmobiliarios hasta el 31 de diciembre de 2024.

Mali Vázquez, directora institucional de la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos (CEDU), subrayó: “Algo importante y positivo a destacar es que la fecha de vigencia del régimen para la afectación de los fondos al proyecto será hasta el 31 de diciembre de 2024 inclusive. Un año más de lo que pretendíamos”.

Por otra parte, los desarrollos que se inscribieron en el Registro de Proyectos Inmobiliarios (REPI) y obtuvieron el Código de Registro de Proyectos Inmobiliarios (COPI) comprendidos en la ley 27.613, siguen vigentes. Los proyectos nuevos pueden ingresar al Registro de Proyectos Inmobiliarios para obtener el COPI.

Damián Tabakman, presidente de la CEDU, resaltó que es un gran momento para invertir en ladrillos en Argentina. “Es barato y estamos ante un cambio de ciclo. Los precios llegaron ya a un piso, en especial los costos de construcción que, a futuro, subirán. Y además este blanqueo es accesible. Vale la pena aprovecharlo. Sobre todo en los primeros 90 días, que tienen la alícuota más baja”.

Desde Consultatio, Diego Schwengber, director comercial, precisó que están analizando la reglamentación, ya que falta definir bien desde el Estado la parte operativa y la forma de administración. “Pero desde ya que es un instrumento útil aplicable en varios de los proyectos de Consultatio, el caso la torre residencial que están construyendo en Huergo 457, como también en los barrios que se han lanzado en Nordelta y Puertos que están en proceso de urbanización, donde se pueden adquirir lotes por este medio”, comentó.