Blanqueo de capitales: sin euforia pero con expectativas

Aunque con resultados por debajo de las expectativas generales, en el mercado de las inmobiliarias y el real estate, y en general en el sector tienen la percepción de que a medida que se extiendan los plazos – la próxima etapa se lanza el 20 de noviembre- más interesados se irán sumando a la inversión en ladrillos que se extenderá hasta el 16 de agosto de 2023.

La incorporación del blanqueo a los inmuebles usados, que finalmente aprobó el Senado en la sesión del jueves último, agrega una nota de optimismo a las respuestas que se dieron a Áreas Globales.

Desde el ámbito de los desarrolladores, Daniel Mintzer, director de GyD Developers, sostuvo:” Creemos que el blanqueo sigue siendo una gran oportunidad para todas las personas que quieran invertir en real estate. A partir del 20 de noviembre los fondos pasan a tributar el 10% del valor de la obra al cambio oficial, aproximadamente el 5% del real. Con lo cual hoy nos sigue pareciendo un buen negocio. El mercado está muy bajo, con precios regalados, mucho más baratos que en las ciudades de países cercanos, y hay obras, productos y oportunidades que esperamos que el público los pueda aprovechar y no se pierdan este blanqueo”.

Damián Tabakman, presidente de la Cámara de Desarrolladores Urbanos, también se mostró satisfecho con los resultados: “sobre el final se fue tonificando el interés, y aunque venció el primer plazo, igual sigue vigente la posibilidad hasta el año próximo, con el incremento de la alícuota”.

“Creemos que es una buena herramienta, junto con la aprobación de la incorporación de los usados” dice, e indica que tiene resultados mejores que los del año anterior.

Cabe recordar que la implementación del blanqueo fue una iniciativa de la Mesa Nacional de la Vivienda, que integran además de la CEDU la Asociación de Empresarios de la Vivienda y Desarrollos Inmobiliarios (AEV), la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), y la Unión obrera de la Construcción (UOCRA) entidades que se ocuparon de explicar la operatoria y difundirla.

Alejandro Bennazar, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina indicó que: “En principio, si bien no se alcanzaron las expectativas que se tenían, se movió gran parte del mercado. Esperamos ahora, aprobada la incorporación del usado por el Congreso, se genere también un blanqueo interesante. Sería un motor bastante importante para movilizar no sólo la compraventa sino también la mano de obra. Especialmente para dar alguna solución a la demanda de alquileres al proveer la incorporación de nuevas unidades, promoviendo reglamentaciones atractivas para lograr este objetivo”.

El consultor Juan Pablo Baca, puso en números los resultados, y fue menos optimista: “Se blanquearon $17.741.000.000 que equivalen a U$S 60.000.000 aproximadamente según la cotización del blue, que representarían como referencia 1.000 departamentos de US$ 60.000 dólares cada uno. Viendo el stock de oferta promedio de los principales mercados del país (CABA, Córdoba y Rosario) equivaldría a menos del 1% del total ofertado por ciudad” una magra cifra, si se estima que los argentinos tienen alrededor de U$S 260.000 millones fuera del sistema.

No obstante, se superó la primera versión de este programa, el año pasado, cuando se blanquearon sólo U$S 960.000.

“Más allá de las cuestiones técnicas y legales beneficiosas, está claro que el problema es la falta de confianza hacia el actual gobierno nacional y su política económica”, estimó el especialista.

Para crecer, sostienen de manera unánime, la Argentina necesita, urgentemente motorizar la inversión, que se genere trabajo, de modo tal que el impulso a la demanda sea genuino y sostenible.